Saturday, November 13, 2010

La asociación Creadores Sin Fronteras de Tánger se hermana con la Asociación Vecinos Casco Antiguo de Mairena del Aljarafe de Sevilla


En un acto presidido por el Sr Alcalde de Mairena del Aljarafe de Sevilla al cual asistieron asociaciones y representantes políticos, se firmó un protocolo de hermanamiento entre la asociación Creadores Sin Fronteras de Tánger (Marruecos) y la asociación de Vecinos Casco Antiguo de Mairena del Aljarafe de Sevilla (España). Dos asociaciones que mantienen vínculos de amistad y colaboración desde 2005 fecha en la que empezaron a trabajar conjuntamente proyectos de educación para la paz, y están convencidos de que el trabajo que desarrollan es una forma de profundizar en la unión entre los pueblos y acabar con el muro de incomprensión y los estereotipos entre los pueblos y las culturas que ambas representan.
Las dos asociaciones, la española ganadora del V Certamen de Iniciativa Solidaria, convocado por la OBGD Jóvenes y Desarrollo, y la marroquí ganadora del premio por la Paz Cuidad de Castellón, decidieron con ese hermanamiento juntar sus esfuerzos en el futuro al igual que lo hicieron en el pasado en proyectos como “Un mundo de colores” con la participación de Palestina y Guatemala, y “Burbujas de Ilusión” que contó con la participación de Colombia, México, Argentina, Palestina, Pakistán, Guatemala, y que ha merecido el reconocimiento y la felicitación de entidades tan importantes como la ONU a través de la Alianza de Civilizaciones desde Nueva York, y de la Cátedra UNESCO de Filosofía para la Paz de la Universidad Jaume I en Castellón, entre otras.

Friday, October 29, 2010

Un regalo de amor


En el mundo hay miles de millones de corazones que buscan encontrar a otros corazones para conocerlos y dialogar con ellos. El mío, como cualquier otro corazón, conoció a varios, algunos los dio vida y paz y otros, sin querer, les quitó la paz que tenían.
Nuestros corazones son unos verdaderos instrumentos para la paz, tienen el poder de inspirar la imaginación de las personas y crear espacios de encuentro, alianzas y sobretodo esperanzas. Todos son iguales, no se diferencian por color, religión o cultura, y tienen un lenguaje común que se entiende en todos los lugares del mundo, sin necesidad de traducciones ni de diccionarios, porque en vez de letras utilizan miradas y sonrisas.
Cuando era pequeño, vivía en el edificio Nº30 de la calle Velásquez en el corazón de Tánger, con familias cristianas, judías y musulmanas. De la convivencia armónica que reinaba en el edificio, mi corazón entendió que una vida larga y sana necesita un corazón grande y acogedor, que une y no divide, que incluye y no excluye. Por eso, preparó todo el espacio para acoger a los miles de millones de corazones que puede encontrar en su vida, hasta que no le quedo ni una plaza para el odio, la xenofobia y el rechazo. Desde entonces, se convirtió en un corazón que acepta los pequeños y los mayores, los pobres y los ricos, los blancos y los negros, los de occidente y los de oriente, los del norte y los del sur; y admite a todas las personas sin importar si son judíos, cristianos, musulmanes u otros. Para él lo más importante es aprender de los demás corazones y alimentarse de su amor.
De hecho, es un corazón que tiene fe en que todo lo que se hace y se dice desde corazón, siempre toca los corazones de los demás, y no tiene dudas de que cada corazón que encuentra en su camino, es un compañero para toda la vida, que con sus aportaciones se puede seguir construyendo puentes de entendimiento y encuentro entre los pueblos, las culturas y las religiones.
Es curioso entender, que al mismo tiempo que las personas pueden tener solamente una religión o ninguna, los corazones pueden creer y aceptar a varias religiones y creencias. Por eso, mi corazón acepta a todos los profetas y cree en todas sus religiones, porque así le enseño la religión que profesa, y así aprendió de los demás corazones que conoció en el tren de la vida y en la parada de ese tren durante años en Tánger, y de otras paradas en España tanto en Madrid como en Castellón. La última parada ha sido Granada, donde conoció a personas majas que transmiten amor y cariño con sus miradas, sonrisas y abrazos, entre ellas, los dueños del Hostal Suizo señor José Ignacio y su mujer Ivana Carina.
Por consiguiente, cada día mi corazón intenta practicar el diálogo de los corazones, que empieza por una sonrisa sincera, un gesto de ternura y un regalo de amor, porque sabe que todos necesitamos un regalo de amor y todos tenemos que aprender a regalar amor.
Un amor que algunos toman como credo, al igual que el filósofo andalusí Ibn Arabí, quien hace siglos atrás dijo «Mi corazón se ha hecho capaz de acoger a todas las formas: es un prado para las gacelas, monasterio para las monjes, altar para los ídolos, piedra negra para los peregrinos, tabla de la Ley y libro del Corán. Profeso la religión del amor, y voy donde me arrastra su cabalgadura, pues el amor es mi credo y mi fe»
Él entendió el verdadero mensaje de las religiones, que al mismo tiempo que llaman a unirse y adorar al único Dios, también enseñan a las personas a amarse a sí mismas y a los demás «ama a tu prójimo como a ti mismo» declara la Biblia y «ama a tu hermano lo que amas a ti mismo» como enseñó el profeta Mohamed a sus seguidores.
Ese amor que nos enseñan las religiones, que profesan algunos filósofos y que utilizan nuestros corazones en su diálogo, es lo que necesita la humanidad en la actualidad, para alcanzar la paz y la felicidad. Tenemos que tener claro que si un río necesita cada gota de agua para seguir fluyendo, la humanidad necesita cada grano de amor para seguir existiendo. Un amor que cada uno de nosotros debe aprender a dar y a recibir de los demás, para que fluya el diálogo de los corazones.

Saturday, September 18, 2010

Entrevista concedida a Laura Garzón Acosta de la Universidad El Rosario -Colombia-

P: Muchos dicen que el islam chií es tan distante del Islam suní que podría tener más similitudes con el cristianismo. ¿Es eso cierto? ¿Por qué?
R: Primero hay que dejar claro que no existe un Islam chií y otro suní, solamente existe un Islam y un Corán que ha sido revelado al profeta Mohamed, pero al igual que pasa en el cristianismo en donde encontramos a católicos, ortodoxos y protestantes, también en el Islam encontramos a musulmanes chiíes y otros suníes. Eso quiere decir, que tanto los suníes como los chiíes creen en un único Dios que revelo el Corán a su último profeta Mohamed, pero tienen un desacuerdo histórico que empezó con la muerte del profeta y que consistía en determinar quién le iba a suceder. Los chiitas querían nombrar a Ali, primo del profeta y marido de su hija Fátima como primer califa, y los suníes querían a Abu bakr, uno de los compañeros del profeta. Eso muestra que las diferencias entre las dos ramas no son confesionales, y que los musulmanes suníes no son tan distantes de los chiitas.
Ahora bien, en mi opinión creo que no solamente el Islam suní tiene similitudes con el cristianismo, sino las tres religiones monoteístas el Judaísmo, el Cristianismo y el Islam tienen muchas similitudes y muchas cosas que las unen. Por tanto, nunca las religiones pueden ser motivo de guerras o de separación entre los siervos de Dios, aunque siempre habrá personas o estados que utilizan las religiones para alcanzar sus intereses, y nuestro deber como personas que creen en el diálogo entre las religiones es mostrar a todo el mundo, creyentes y no creyentes, que todas las religiones llaman a la paz y no a la violencia, y que no existe un terrorismo religioso ni una religión terrorista, sino personas que utilizan las religiones para dominar el mundo sembrando miedo y terror entre la humanidad.
P: ¿Hacia dónde va el islam chií moderno?
R: Para mí no existe un islam chií moderno, sino unos musulmanes chiitas que con la revolución iraní de 1979 y la caída del régimen del Shah obtuvieron una fama que traspaso las fronteras hasta el punto de que muchos países musulmanes y árabes temían que la revolución pasara a sus países y acabara con sus regímenes. En la actualidad se habla de un chiismo moderno porque antes de la revolución de Ayatola Jomeini pocos habían escuchado hablar de los chiitas, que son una minoría musulmana, pero después pasaron a ser noticia no sólo in Irán sino también en el Líbano con Hizbulah y su resistencia al ejército israelí en 2006. Eso quiere decir que los chiitas en la actualidad son un símbolo de resistencia para la mayoría de los musulmanes en el mundo contra el imperialismo estadounidense y la negativa de Israel a reconocer al estado de Palestina, eso les da más fuerza, y hace que crezca el número de suníes que pasan a ser chiitas como pasó últimamente en algunos países árabes.
P: Algunos clérigos soñaban con establecer en Irán un gobierno islámico a la imagen de los talibanes en Afganistán ¿Qué ha pasado con esa pretensión?
R: Creo que no podemos comparar los talibanes de Afganistán con Irán. Primero porque Irán en la opinión de muchos era un estado democrático hasta que las últimas elecciones mostraron que no todos los iraníes admiten que viven en un estado democrático, pero los talibanes, y como se sabe, han sido creados y subvencionados por la CIA de los Estados Unidos antes de la invasión de la Unión Soviética a Afganistán para acabar con los soviéticos que cayeron en la trampa.
Para dejar las cosas claras y mostrar que en ningún país islámico ni siquiera Irán quera establecer un gobierno a la imagen de los talibanes porque no son un movimiento de musulmanes fanáticos como cree la mayoría de nosotros, sino unas personas que trabajaban con la CIA en muchos casos sin saberlo. Me gustaría citar una entrevista concedida a la revista Le Nouvel Observateur en 2006 por Zbigniew Brzezinski, quien ocupó el puesto de Consejero de Seguridad Nacional en la época del presidente estadounidense Jimmy Carter. Brzezinski afirmo que aunque se cree que la CIA inició su colaboración con los muyahidines en el año 1980, o sea después de que los soviéticos invadieran a Afganistán el 24 de diciembre de 1979, la realidad es distinta: “fue el 3 de julio de 1974 cuando el presidente Carter firmó la primera directiva sobre la asistencia clandestina a los opositores del régimen pro soviético de Kabul. Aquel día le escribí una nota al presidente en la que le explicaba que, en mi opinión, aquella ayuda provocaría la intervención de los soviéticos. No empujamos a los rusos a intervenir, pero conscientemente aumentamos las probabilidades de que lo hicieran”. Más aún cuando le preguntó el periodista si no lamentaba la creación de los Talibanes que se consideran el enemigo principal de Estados Unidos en la actualidad respondió lo siguiente: “esa operación secreta era una excelente idea. Tuvo como efecto atraer a los rusos a la trampa Afgana, ¿y usted quiere que lo lamente? El día en que los soviéticos cruzaron oficialmente la frontera afgana escribí al presidente Carter diciéndole que era nuestra oportunidad de darle a la URSS su Vietnam. ¿Qué es lo más importante ante la mirada de la historia mundial: los talibanes o la caída del imperio soviético? ¿Algunos islamistas excitados o la liberación de Europa Central y el fin de la Guerra Fría?
Esas declaraciones al mismo tiempo que nos descubre la verdadera historia de los talibanes, nos muestran la realidad del mundo en donde vivimos y nos enseña que la verdad nunca se puede enterrar, porque tarde o temprano habrá quien la exhume y darla a conocer.
Con eso quiero decir que no creo que Irán quería o quiere seguir el ejemplo de los talibanes, sino a veces tenemos que tener cuidado con lo que leemos o escuchamos en los medios de comunicación, porque declaraciones así hacen que la gente asocia a Irán y al islam con las barbaridades que hacían los talibanes y justificar así cualquier intervención militar contra Irán.
P: ¿Cómo ve la influencia de los credos religiosos en la toma de decisiones actuales en Irán?
R: Irán es un estado islámico y el Islam no separa entre lo religioso y lo político, por tanto el problema no es la influencia de los credos religiosos en la toma de decisiones, que es algo normal en cualquier estado musulmán, sino la interpretación que se da a esos credos religiosos.
Debemos aclarar, que no hay que tener miedo de la influencia de los credos religiosos y del Islam en la toma de las decisiones políticas, porque el Islam es una religión que llama a la paz y al amor al igual que las demás religiones y mientras Irán siga teniendo al Islam como fuente de sus decisiones políticas siempre estará abierta al diálogo y a la negociación con los demás. Cabe recordar aquí que el presidente de Irán Mohamed Jatami en la 53ª Sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York, el 21 de septiembre de 1998 propuso que las Naciones Unidas, designen al año 2001 el "Año de Diálogo entre las Civilizaciones", una propuesta que fue aprobada por más de 180 países, y que muestra las buenas intenciones de Irán.

CÓMO HACER LA PAZ
P: Desde tu experiencia, ¿cómo sería posible una salida pacífica a la tensión que causa Irán en el contexto internacional y su enriquecimiento de uranio?
R: Creo que al mismo tiempo que hay una sola vía violenta para resolver nuestros conflictos, también hay muchas vías pacificas para transformarlos y aprender de ellos. Por eso, estoy seguro de que no solamente existe una salida pacífica a la tensión que causa el programa de enriquecimiento de uranio en Irán sino muchas. La primera de todas es estar convencidos de que el uso de la violencia no es la solución, tampoco es el aislamiento de Irán porque dividirnos en ejes de mal y ejes de bien nunca nos llevará a la paz. La paz empieza con un mundo unido y fuerte, ya que la unión nos da fuerza que no debemos usar contra los demás diferentes sino contra los grandes desafíos que tiene la humanidad como es el cambio climático, la pobreza y la incomprensión del otro, algo que aprovechan algunos para aterrorizarnos. La segunda vía es la justicia. Si otros países pueden enriquecer el uranio para fines pacíficos ¿por qué Irán no? Por qué no se habla de los países de la región como Pakistán, Israel y la India que ya tienen bombas nucleares y se habla más de Irán que según su gobierno su programa es por fines pacíficos. En ningún momento quiero justificar el programa nuclear de Irán pero la justicia para mí significa empezar dialogando con los países que ya tienen bombas nucleares entre ellos Rusia, EEUU, Francia, Reino Unido y China para que las eliminen y para que den ejemplo a los demás países que están gastando mucho dinero en programas nucleares que nos perjudican a todos, como lo dieron otros países que antiguamente poseyeron armas nucleares como es el caso de Sudáfrica. Si queremos vivir en paz es tiempo de establecer un dialogo responsable con Irán, no amenazándola con guerras si no cumple con las ordenes de Occidente sino dándole las garantías de que se trabajará para la eliminación de las bombas nucleares en todo el mundo porque constituyen una amenaza a toda la humanidad. Por eso, la salida pacífica al problema nuclear de Irán, empieza por una alianza universal para acabar con la idea de que la bomba nuclear significa la seguridad total, ya que muchos estados creen que obteniendo la bomba nuclear significa pertenecer al club de los países intocables.
P: ¿Cuál es el error de occidente a la hora de acercarse a Oriente?
R: Primero supongo que con la palabra Oriente te refieres a los países árabes e islámicos. Personalmente creo que tanto Occidente como los países islámicos y árabes están haciendo un esfuerzo tremendo para acercarse uno al otro y establecer un dialogo que les pueda facilitar la convivencia pacífica, pero el error que cometen los dos es que ninguno conoce ni reconoce al otro con sus diferencias. De un lado, Occidente sigue viendo al Islam como si fuera algo ajeno y lejano y si olvida de los millones de musulmanes que son ciudadanos occidentales, y de las aportaciones de Al Ándalus y de los científicos e intelectuales musulmanes contemporáneos a la civilización Occidental. Del otro lado, y como Occidente se mete cada vez más en los asuntos internos de los países islámicos y árabes, la mayoría de los ciudadanos árabes y musulmanes tienen la impresión de que sus países siguen sufriendo la colonización occidental materializada en el miedo y la humillación que sufren diariamente por sus gobiernos dictatoriales protegidos y apoyados por Occidente. Por eso creo que el único choque que existe es un choque entre los humillados y los humilladores tanto internos como externos, entre los que buscan la dignidad y los que les priven de ella, por lo que es un choque entre la humillación y la dignidad.
Es importante señalar que el error que cometen los dos, es que cada uno quiere convencer al otro de sus valores. Y como vivimos en la era de globalización o de americanización, no podemos negar la fuerza y la influencia de Occidente en toda la planeta, y que en la mayoría de las veces, cuando quiere acercarse a los demás países o culturas, lo hace para convencerlos de sus valores y su democracia que según muchos occidentales es la perfecta y la ideal para establecer la paz en el mundo.
Por eso, los países occidentales tienen que ser modestos culturalmente y saber que ninguna cultura es mejor que otra y los países árabes y musulmanes tienen que tener claro que nadie tiene la verdad absoluta. Por tanto, los dos tienen que saber que cualquier acercamiento a las demás culturas empieza por aceptarlas, y respetarlas no con el objetivo de convencerlas a cambiar sus valores, sino de encontrar el equilibrio y el punto de encuentro entre todas las culturas, algo que permitirá a todos convivir en paz y enriquecer nuestra civilización humana, ya que en la actualidad tenemos varias culturas pero solamente una civilización que es la civilización humana.

Friday, September 17, 2010

La importancia de nuestras memorias personales en el diálogo de los corazones

Después de un año fuera de Castellón hoy he vuelto a respirar ese aire pacífico que tanto añoraba. Pocos entenderán esa sensación, pero seguro, todos los que tuvieron la oportunidad de estar en Castellón haciendo el Máster Internacional en estudios de Paz, Conflictos y Desarrollo, o en compañía de sus estudiantes, la experimentaron al igual que yo. Para todos, es claro que la magia de los estudios para la paz, no está solamente en los libros leídos ni en las clases asistidas, sino también en la convivencia diaria con el otro diferente que nos hace sentir ricos con todo lo que aprendemos de los demás y de sus experiencias.
Es cierto que estudiar la paz es importante, pero aún más importante es experimentarla, porque la paz no se encuentra en los libros, sino se vive con los sentimientos. Tampoco se impone, sino se construye.
Aquí en Castellón, con mis amigos de diferentes culturas y religiones y con los propios castellonenses, he aprendido que Dios es grande y quiere ser adorado de diferentes maneras e idiomas, en diferentes lugares y tiempos. Este es el secreto de la diversidad que Allah quiere que entendamos para conocernos y para evitar que nos matemos por Él. Un Dios, que nos ha creado diferentes para mostrarnos su grandeza y para darnos la oportunidad de conocernos mejor a través del otro, nunca querrá vernos enfrentados para adorarle de una manera o de otra. Su grandeza merece ser adorada de diferentes maneras y en diferentes lenguas. Todas las religiones son suyas, no existe una religión terrorista, ni terrorismo religioso, todas llaman a la paz, al amor y al buen trato del otro.
Es lo que he aprendido de mis experiencias con personas de diferentes culturas y religiones, que cuando piden algo a Dios dicen Amén. Es curioso escuchar a un cristiano, un judío o a un musulmán, a pesar de sus diferentes idiomas, diciendo todos Amén. Pero al mismo tiempo que nos une la palabra Amén, también nos unen nuestras experiencias personales y yo, como cualquiera de vosotros, tengo en mi vida momentos inolvidables y detalles que cambiaron totalmente mi mirada al mundo, ya que no hay personas sin memorias, ni tampoco memorias sin personas.
Por eso, no hay nada mejor que compartir nuestras memorias que nos enseñan a respetar las diferencias y a darnos cuenta de cuánto Dios nos quiere por crearnos diferentes. Me imagino la alegría de Dios el día que nos vio a Gloria de México y a mí rezando, cada uno de su manera, a la misma hora y en diferentes continentes, o también cuando mi amiga Bienvenida de Madrid me regaló un Corán el día de mi cumpleaños, y qué decir de los días que pasé con mi amigo Arcenio, ex estudiante del Máster y pastor de la Iglesia protestante, rezando varias veces juntos en su habitación y él bendiciendo la comida, mientras yo decía en nombre de Dios antes de cada comida, en donde no faltaba algo con sabor español. Sin olvidar su alegría cuando mi madre Soadia me mandaba de pequeño a traer comida de mi vecina Estrella, una señora mayor que con una hermosa sonrisa me corregía mis primeras letras en castellano; para calentarla porque ella por ser judía no podía hacerlo en su casa los sábados, tampoco me dormía los viernes temprano y tenía que esperar la llegada de mi vecino judío Mauricio, quien me hacía el nudo de mi corbata cada vez que me tocaba ir de fiestas; para encenderle la luz del edificio porque él no lo podía hacer. Y qué decir de la alegría que compartiría con Dios y con mis amigos, cuando les llamaba para felicitarles en cada año por la Nochebuena, o cuando ellos me llamaban para felicitarme por la fiesta del Ramadán y del cordero. Seguro que Dios estaba contento cuando Martín me invitó un día del Ramadán a comer con él y tenía que esperar con su familia hasta la puesta del sol para poder comer juntos. Aquel día todos nos reímos mucho, porque él me pidió bendecir la comida y yo le pedí lo mismo y calladitos nos pasamos un buen rato sin comer, pensando que uno u otro estaba bendiciendo la comida mientras yo preguntaba ¿Tanto tiempo necesitan los cristianos para bendecir la comida?
Todo eso sin olvidar la hospitalidad, que es un espacio de encuentro entre diferentes culturas y un verdadero instrumento de paz y amor entre los pueblos. Esa hospitalidad, que he experimentado tanto en España como en Estados Unidos, la llevo guardada no solamente en la memoria de mi mente, sino en las memorias de mi corazón, nunca olvidaré a Leonor de Tudela quién me abrió las puertas de la primera casa española, ni a la madre de David quien nos hospedó a casi todos los estudiantes del Máster en su casa de Villamarchante en Valencia, ni a Carmen y Lidón de Castellón, ni tampoco a Manolo y su familia en Mairena del Aljarafe en Sevilla quienes siempre tenían no solamente las puertas de sus casas abiertas para mí y mis amigos del Máster, sino también las puertas de sus corazones.
Es importante el efecto que tienen las acciones que se hacen desde el corazón, porque son acciones que no se olvidan y se quedan guardadas en el corazón del otro. Por eso, tenemos que aprender a actuar y reaccionar desde nuestros corazones, y compartir nuestras experiencias personales de las que tenemos mucho que aprender.
Son solamente algunas de mis experiencias personales con el otro, que me han hecho entender que el amor de Dios a una persona se ve en las caras de las demás personas, y yo lo he visto y vivido en las caras y los gestos de mis amigos cristianos, judíos y musulmanes en Marruecos y en España y, sobretodo, en Castellón. Con todos aprendí que la paz nace y crece con nuestro comportamiento cotidiano. Una mirada de agradecimiento, una sonrisa o una palabra dicha desde el corazón, es el verdadero lenguaje de Dios que todos entendemos a la perfección y es el camino hacia una convivencia armónica entre todos.
Por tanto, es tiempo de amarnos, es tiempo de conocernos a través de nuestras experiencias personales y de nuestras memorias del corazón, es tiempo de sonreír al otro en vez de estar esperando su sonrisa, y es tiempo de abrir las puertas de nuestras casas y de nuestros corazones al otro en busca de un diálogo y una alianza de sentimientos y de corazones.

Wednesday, August 18, 2010

El consulado de España en Tánger y los derechos humanos

En la vida, hay valores que trascienden las naciones y las fronteras, que nos unen y no nos separan, que nos enseñan a respetarnos y a amarnos, y nuestro deber como seres humanos, es aplicarlos en nuestra vida cotidiana, y al mismo tiempo reclamar a quiénes no los aplican. Uno de esos valores es la igualdad, que lamentablemente nos falta en la actualidad, porque da pena llamar al número de emergencia del consulado de España en Tánger por una emergencia, y escuchar que es un número que atiende solamente a los españoles. Me pregunto, qué pasaría si llamara un español al consulado marroquí en España y escuchara la misma respuesta.
España, nuestro vecino europeo con el cual compartimos mucha memoria, que es miembro de Naciones Unidas desde 1955, y que firmó la Declaración Universal de los Derechos Humanos que otorga a todos los seres humanos los mismos derechos sin distinción alguna de nacionalidad, sexo, origen nacional o étnico, religión o lugar de residencia, nos debe dar el ejemplo de un país democrático que vela por la justicia, y por una alianza de civilizaciones basada en la igualdad de derechos y deberes.
No puedo negar mi admiración y respeto a España y a los españoles con los cuales comparto mis ilusiones e inquietudes, pero tampoco puedo negar mi decepción del trato que reciben algunos marroquíes en el consulado español en Tánger, que a veces les tratan como se fueran todos unos futuros inmigrantes.
Personalmente, no entiendo como el personal del consulado que estudia las solicitudes de visados, no contestara durante más de 17 días a un paciente que tenía una cita de control con un neurocirujano, quien le operó en un hospital de Córdoba porque su caso es inoperable en Marruecos.
Casos así, en el que el solicitante del visado pierde una cita de control que solicitó finales de abril, y que puede perder hasta su vida por la urgencia del control y la negligencia del consulado, muestran que el Ministerio de igualdad español y los responsables de la política exterior española deben repensar su noción de igualdad y de justicia que quieren presentar y ofrecer a los ciudadanos del mundo.
Es cierto, que el consulado de España en Tánger tiene derecho a investigar, entrevistar y denegar el visado a los que no reúnen todos los requisitos, pero también tiene la obligación de respetar los derechos humanos como el derecho a la vida, a la dignidad y a la igualdad, y tratar a los marroquíes, por lo menos en Marruecos, al igual que trata a los españoles.

Saturday, June 5, 2010

La flotilla de la libertad inaugura una intifada humana contra la violencia y la injusticia


La comunidad internacional que siempre defendía a Israel por ser un estado democrático y pacífico sufrió el terrorismo de estado que suporta el pueblo palestino desde hace más de 60 años. La operación militar contra la flotilla de la libertad que acabo con la vida de algunos activistas pro-palestinos, mostró a todo el mundo las salvajadas de Israel que quiere imponer con la fuerza su paz, olvidando que la paz no se impone sino se construye entre todos.
Asaltar y matar a unos pacifistas que querían con un acto pacífico dar libertad y justicia a los más de un millón y medio de personas encarceladas en Gaza, muestra a toda la comunidad internacional, que Israel desafía la paz, y a todos los seres humanos que creen en la paz y en la no violencia como un instrumento para transformar pacíficamente nuestros conflictos.
Un país arrogante y egoísta como Israel, que nunca reconoce sus errores, que justifica operaciones militares contra centenares de pacifistas, y que aplica el bloqueo a la franja de Gaza desde más de tres años, no puede ser pacifista, tampoco puede ser víctima de un asalto de la hipocresía internacional como señaló su primer ministro Netanyahu, quien calificó la flotilla de la libertad en la cual participaron más de 40 nacionalidades de “operación terrorista”, o sea, para él, todos los que creen en las acciones pacifistas son terroristas .
Es evidente, que Israel con su crimen contra los pacifistas humilla no solamente a los palestinos, sino a toda la humanidad. Por eso, necesitamos una intifada humana y pacífica contra la humillación y la injusticia, y por la libertad y la dignidad humana. La paz se consigue cuando todos los estados gozan de los mismos derechos y de los mismos deberes, e Israel con sus actos y crímenes contra la humanidad no respeta ninguna ley internacional, al contrario muestra que la ley del más fuerte es la única ley que conoce.
Con su crimen contra la flotilla, Israel quiere transmitir un mensaje claro a todos los que creen en las iniciativas pacificas, que no dudará en usar la fuerza para defender su genocidio en Gaza y en Palestina, y nuestro mensaje y respuesta a todos los estados que tienen esa idea es el siguiente: los pro-palestinos que estuvieron a bordo de la flotilla consiguieron con su compromiso a la libertad, la justicia y la paz, abrir el paso de Rafah y liberar a los palestinos encarcelados en Gaza, algo que ni la diplomacia ni la resistencia armada consiguió hasta ahora, y por tanto, nos enseñaron que las acciones pacíficas son más fuertes que las acciones militares, y que se consigue más con la unión pacífica de todos que con la potencia militar de algunos.
Al mismo tiempo hemos aprendido que la utilización de la fuerza para frenar una iniciativa pacifica es una señal de debilidad y de miedo a la paz. Si la comunidad internacional quiere vivir en paz, los políticos y los responsables de la Alianza de Civilizaciones que gastan millones de dólares en foros como el último de Brasil al cual ni siquiera asistió el presidente Zapatero, tienen el deber de mandar flotillas con niños de diferentes culturas y religiones a Gaza y a todos los lugares del mundo que sufren la injusticia, para que la generación de mañana entienda que juntos con nuestras diferencias podemos construir la paz, y que el único camino hacia la paz es ser pacifista y creer en la eficacia de las acciones pacíficas.

Monday, May 24, 2010

La paz es cosa de todos


Hablar de la paz es hablar de la historia del ser humano, que desde la eternidad ha buscado la paz de diferentes maneras. Una paz que primero identificaba como ausencia de guerras y de conflictos, pero que más tarde se dio cuenta de que es la capacidad que tiene cada uno de tolerar, dialogar y reconocer al otro; y al mismo tiempo, es la voluntad de cada individuo de convivir con tanta diversidad, y de transformar pacíficamente los conflictos que se les presentan en la vida, buscando el desarrollo de toda la humanidad y no solamente el desarrollo personal.
Por tanto, la paz es un proceso dinámico que exige el compromiso de todos y todas. Cada persona debe asumir su responsabilidad en la construcción de la paz desde su área de conocimiento, porque la paz no es cosa de Occidente ni de Oriente, es cosa de toda la humanidad, que con sus diferencias, debe contribuir en la construcción de las culturas de la paz.
Qué sentido tendría la vida si tuviera una canción, una comida o un paisaje. Sin duda sería una vida aburrida, al igual que una vida con un idioma, una cultura o una religión. Por ello, debemos estar convencidos de que la diversidad es un don que hace que nuestra vida tenga sentido, y que el mundo sea un cóctel de culturas, que disfrutamos todos, y que nos lleva a descubrir nuestra paz interior, porque la paz es algo que cada ser humano lleva dentro.
Esa paz interior es la que nos hace creer que todos somos pacifistas, y nos olvidamos de que la paz es como una vela, al mismo tiempo que sirve para iluminar, también sirve para quemar, ya que la mayoría de las barbaridades en el mundo se cometen en nombre de la paz. Por eso, debemos lograr que nuestras velas sean unos candiles que nos iluminen a todos blancos y negros, autóctonos e inmigrantes, occidentales y orientales nuestro camino hacia el paraíso de la paz.

Sunday, May 2, 2010

Alliance of Civilizations International Fellowship Programme

Los participantes árabes con Creig Kennedy, presidente de GMF
No hay dudas de que en un mundo global necesitamos programas que fomentan la compresión mutua y el entendimiento entre todos los pueblos, sin imponer la fe y la cultura del más fuerte, sino respetando las diferencias, y promoviendo los derechos humanos y las libertades que nos puedan ayudar a confrontar los retos que tiene la humanidad en la era de globalización. Uno de esos programas es Alianza de Civilizaciones; o como me gusta personalmente llamarlo “Civilización de Alianzas”, que organizó últimamente con la colaboración de German Marshall Fund of the United States (GMF), la Liga de los Estados Árabes, la Organización Islámica para la Educación la Ciencia y la Cultura (ISESCO) y British Council, el primer programa del compañerismo internacional de la Alianza de Civilizaciones (AoCIF).
El programa que eligió veinticuatro líderes emergentes de América, Europa, Norte África y Oriente Medio se desarrolló en dos etapas, cada uno de dos semanas: la primera dedicada a los jóvenes europeos y norteamericanos quienes visitaron Qatar, Egipto Y Marruecos, y la segunda etapa consagrada a los jóvenes árabes quienes visitaron Bélgica, Londres, Paris y EEUU. Unos viajes que permitieron a los participantes adquirir un amplio conocimiento de la vida política, económica, y social de los demás países y al mismo tiempo reflexionar ante los retos que enfrentan tanto Oriente Medio y Norte África (MENA), como Europa y los Estados Unidos. Eso permite a los líderes emergentes crear redes para acabar juntos con el muro del odio y de la incomprensión que algunos fundamentalistas quieren levantar entre Occidente y los países árabes y musulmanes.
De ese modo el programa AoCIF ha sido creado para contribuir a un mejor conocimiento entre los países árabes y Europa y América del Norte, y animar a los líderes emergentes a colaborar y a enfrentar juntos los retos políticos nacionales e internacionales que afronta la humanidad, aportando sus conocimientos y participando juntos en un diálogo que aumenta la comprensión mutua y la mejora de las relaciones internacionales como dijo Jorge Sampaio, Alto Representante de la ONU de la Alianza de Civilizaciones "Como los líderes emergentes son los agentes de cambio, los participantes estarán en condiciones de aportar conocimiento profundo de las diversas sociedades en los debates actuales y permitir que otros se beneficien de sus perspectivas".

Saturday, February 13, 2010

Obama y el premio Nobel de la guerra

“Habrá momentos en los que nuestras naciones –actuando por separado o en conjunto- encontrarán el uso de la fuerza no sólo necesario, sino moralmente justificado”. Estas palabras que justifican la guerra y el uso de la violencia no las pronunció un terrorista ni un fundamentalista, sino el ganador del premio Nobel de la paz. O sea, estamos hablando de un premio Nobel de la paz que defiende la guerra justa. Dicho de otra manera, con el premio de la paz en la mano, y con su discurso aplaudido en Oslo sobre la defensa de la guerra justa, Obama tiene ya luz verde para hacer más guerras en nombre de la paz, y vender más armas para realizar su justicia en el mundo.
Es curioso, después de tantas experiencias y tragedias causadas por las guerras, algunas personas siguen pensando que el único camino hacia la paz, es derramar más sangre y provocar más guerras preventivas e injustas; ya que no existen guerras justas como lo defiende el premio Nobel de la paz. Obama quiere convencernos de que la cultura de la fuerza y de las armas es el camino para la transformación de nuestros conflictos, y que solamente con acciones violentas podemos acabar con el mal que existe en el mundo, ya que según sus palabras “un movimiento no violento no hubiera podido frenar el ejército de Hitler. Ninguna negociación puede convencer a los líderes de Al Qaeda para que entreguen sus armas”.
Es una lástima, que el premio de la paz aún no ha entendido que vivir en paz no significa erradicar el mal, ni acabar con las personas conflictivas. Seremos injustos e irrealistas si creemos que podemos vivir en un mundo sin conflictos intrapersonales, interpersonales e internacionales. Cada persona tiene su lado positivo y negativo y vivir en paz es encontrar el equilibrio entre los dos lados de la persona. Encontrar el equilibrio entre lo positivo y lo negativo, lo material y lo espiritual, los derechos y los deberes, los intereses de la misma persona y de la comunidad es vivir en paz.
Una paz que se consigue con las personas y con nuestras acciones cotidianas. Cada persona es responsable de la construcción de puentes de entendimiento entre las personas y las culturas. Un entendimiento que no significa controlar al otro, ni tampoco tenerle miedo, sino aceptarle con sus diferencias y dialogar con él.
Es hora de saber, que nadie tiene la obligación de renunciar a sus ideales, ni el derecho de defenderlos violentamente. Hay que optar por una convivencia pacifica entre todas las ideologías y las creencias, facilitando el diálogo y la interacción entre todas las culturas. Cada ser humano tiene la oportunidad ahora de trabajar por la paz, que no es cosa de algunos sino de todos. Todos los pueblos están llamados a ser protagonistas y responsables de sus actos porque son los únicos que pueden lograr el cambio positivo para el bien de la humanidad.
Esa es la paz que tiene que defender el premiado de la paz, quien dirige hasta hoy dos guerras en Irak y Afganistán, y con su discurso nos prepara para futuras guerras contra Irán y Corea del Norte, a los que mencionó en su discurso.
Sin duda, la entrega del premio de la paz al presidente del ejército más poderoso del mundo, a la persona que acaba de mandar 30.000 soldados más a Afganistán, a quien pronunció un discurso belicista en la ceremonia de entrega del premio de la paz, constituye una humillación a toda la humanidad, sobre todo a los pacifistas, y una prueba más de que vivimos en un mundo injusto que premia en nombre de la paz a personas que creen en la guerra como instrumento para hacer la paz.
Todos habíamos aplaudido las buenas iniciativas del presidente Obama al inicio de su mandato, y la decisión de otorgarle el premio Nobel de la paz por sus buenas intenciones y sus lindas palabras por la paz. Nadie puede negar que el presidente estadounidense recibió el premio Nobel de la paz, no por lo que ha hecho, sino por lo que ha dicho al mostrar su intención de acabar con la tortura ordenando el cierre de Guantánamo, y tomando la iniciativa del desarme nuclear. Pero ahora, con su defensa de una guerra justa, merece que se le retire el premio Nobel de la paz, porque una persona que defiende la guerra no es un ejemplo que deben seguir los futuros premios Nobel de la paz. Retirarle el premio Nobel de la paz al presidente estadunidense, no significa castigarle por su discurso bélico, sino es una manera de mostrarle que no estamos de acuerdo con su noción de la paz, y que estamos convencidos de que al igual que hay una sola vía violenta para resolver los conflictos, también existen varias vías pacíficas para transformarlos y aprender de ellos. Es una manera de manifestarle nuestro descontento con las guerras, y decirle que estamos convencidos que ninguna persona desea una paz conseguida con sangre humana.

"Burbujas de ilusión" Una experiencia de educación para la paz


Niños de Santa Sylvina en Argentina, Currulao en Colombia, Cuilapa en Guatemala, Tánger en Marruecos, Oaxaca de Juárez en México, Gaza y Cisjordania en Palestina, Azad Kashmir en Paquistán y Mairena del Aljarafe en Sevilla se han unido y han escrito un libro de paz en árabe, castellano e inglés que fue presentado en un Encuentro Internacional de Educación para la Paz que se celebró en Mairena del Aljarafe el día 12 de diciembre, y que ha supuesto un reto tanto para los 258 niños y niñas participantes como para los 24 educadores de los diferentes países que los han acompañado durante los dos años de trabajo que ha durado este proyecto multicultural.El objetivo del mismo ha sido crear puentes de amistad entre personas de diferentes culturas, religiones, lenguas, razas y países. Y en opinión de las delegaciones de estos países, que han estado en España durante el Encuentro Internacional, se ha conseguido plenamente.Han participado en esta experiencia delegaciones de la Asociación de Vecinos Casco Antiguo de Mairena del Aljarafe (Sevilla) que coordinó todo el Encuentro, Creadores sin Fronteras de Tánger (Marruecos), Escuelas Oficiales Rurales Mixtas los Matochos de Cuilapa, Sta Rosa (Guatemala), Tamer Istitute for Community Education en Gaza (Palestina), The Darna Center en Nablus, Cisjordania (Palestina), el Colegio de EGB nº 1013 de Santa Sylvina, Chaco(Argentina), el Colegio José Mª Moleros y Pavón de Oaxaca de Juárez (México) la Institución Educativa Currulao de Currulao (Colombia) y Kashmir Development Foundation de Azad Kashmir (Pakistan)Este proyecto ha recibido el apoyo y la felicitación de la Oficina para la Alianza de Civilizaciones de la ONU en Nueva York, la Presidencia del Gobierno de España, la Cátedra UNESCO de Filosofía para la Paz y del propio Presidente de la Junta de Andalucía que envió unas palabras para que fueran leídas al comienzo del Encuentro Internacional del día 12 de diciembre de 2009.También recibieron el apoyo de la Fundación de la Obra Social de la Caixa, el Diputación de Sevilla y el Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe.En palabras del representante de Marruecos, Said Bahajin, “esto si que es la Alianza de Civilizaciones, aquí estamos reunidos personas de diferentes religiones, culturas, razas y lenguas, hemos trabajado juntos y nos duele separarnos, hemos llegado a ser como hermanos. Para nosotros la Alianza de Civilizaciones se resume en un palabra AMOR”