Monday, May 24, 2010

La paz es cosa de todos


Hablar de la paz es hablar de la historia del ser humano, que desde la eternidad ha buscado la paz de diferentes maneras. Una paz que primero identificaba como ausencia de guerras y de conflictos, pero que más tarde se dio cuenta de que es la capacidad que tiene cada uno de tolerar, dialogar y reconocer al otro; y al mismo tiempo, es la voluntad de cada individuo de convivir con tanta diversidad, y de transformar pacíficamente los conflictos que se les presentan en la vida, buscando el desarrollo de toda la humanidad y no solamente el desarrollo personal.
Por tanto, la paz es un proceso dinámico que exige el compromiso de todos y todas. Cada persona debe asumir su responsabilidad en la construcción de la paz desde su área de conocimiento, porque la paz no es cosa de Occidente ni de Oriente, es cosa de toda la humanidad, que con sus diferencias, debe contribuir en la construcción de las culturas de la paz.
Qué sentido tendría la vida si tuviera una canción, una comida o un paisaje. Sin duda sería una vida aburrida, al igual que una vida con un idioma, una cultura o una religión. Por ello, debemos estar convencidos de que la diversidad es un don que hace que nuestra vida tenga sentido, y que el mundo sea un cóctel de culturas, que disfrutamos todos, y que nos lleva a descubrir nuestra paz interior, porque la paz es algo que cada ser humano lleva dentro.
Esa paz interior es la que nos hace creer que todos somos pacifistas, y nos olvidamos de que la paz es como una vela, al mismo tiempo que sirve para iluminar, también sirve para quemar, ya que la mayoría de las barbaridades en el mundo se cometen en nombre de la paz. Por eso, debemos lograr que nuestras velas sean unos candiles que nos iluminen a todos blancos y negros, autóctonos e inmigrantes, occidentales y orientales nuestro camino hacia el paraíso de la paz.

Sunday, May 2, 2010

Alliance of Civilizations International Fellowship Programme

Los participantes árabes con Creig Kennedy, presidente de GMF
No hay dudas de que en un mundo global necesitamos programas que fomentan la compresión mutua y el entendimiento entre todos los pueblos, sin imponer la fe y la cultura del más fuerte, sino respetando las diferencias, y promoviendo los derechos humanos y las libertades que nos puedan ayudar a confrontar los retos que tiene la humanidad en la era de globalización. Uno de esos programas es Alianza de Civilizaciones; o como me gusta personalmente llamarlo “Civilización de Alianzas”, que organizó últimamente con la colaboración de German Marshall Fund of the United States (GMF), la Liga de los Estados Árabes, la Organización Islámica para la Educación la Ciencia y la Cultura (ISESCO) y British Council, el primer programa del compañerismo internacional de la Alianza de Civilizaciones (AoCIF).
El programa que eligió veinticuatro líderes emergentes de América, Europa, Norte África y Oriente Medio se desarrolló en dos etapas, cada uno de dos semanas: la primera dedicada a los jóvenes europeos y norteamericanos quienes visitaron Qatar, Egipto Y Marruecos, y la segunda etapa consagrada a los jóvenes árabes quienes visitaron Bélgica, Londres, Paris y EEUU. Unos viajes que permitieron a los participantes adquirir un amplio conocimiento de la vida política, económica, y social de los demás países y al mismo tiempo reflexionar ante los retos que enfrentan tanto Oriente Medio y Norte África (MENA), como Europa y los Estados Unidos. Eso permite a los líderes emergentes crear redes para acabar juntos con el muro del odio y de la incomprensión que algunos fundamentalistas quieren levantar entre Occidente y los países árabes y musulmanes.
De ese modo el programa AoCIF ha sido creado para contribuir a un mejor conocimiento entre los países árabes y Europa y América del Norte, y animar a los líderes emergentes a colaborar y a enfrentar juntos los retos políticos nacionales e internacionales que afronta la humanidad, aportando sus conocimientos y participando juntos en un diálogo que aumenta la comprensión mutua y la mejora de las relaciones internacionales como dijo Jorge Sampaio, Alto Representante de la ONU de la Alianza de Civilizaciones "Como los líderes emergentes son los agentes de cambio, los participantes estarán en condiciones de aportar conocimiento profundo de las diversas sociedades en los debates actuales y permitir que otros se beneficien de sus perspectivas".